Existen dos tipos de sillas salvaescaleras: las sillas rectas y las sillas curvas. Por lo tanto se pueden instalar en prácticamente todo tipo de escaleras. Las sillas salvaescaleras no requieren obra para su instalación. Son idóneas para ser utilizadas por personas con problemas de movilidad o personas que, por determinadas circunstancias, tienen dificultades para subir o bajar las escaleras.
Cualquier lugar es apto para la instalación de una silla salvaescaleras. Normalmente este tipo de salvaescaleras suele instalarse en las viviendas particulares, ya que son las que cuentan con escaleras más estrechas. Las sillas salvaescaleras apenas ocupan espacio y no interrumpen el paso en la escalera.
Las sillas salvaescaleras rectas están diseñadas para instalarse en tramos de escalera sin giros ni cambios de pendiente. Cuentan con una guía rectilínea que se fija a los peldaños de la escalera mediante varios puntos de apoyo colocados estratégicamente según la longitud de la escalera. Su instalación sin necesidad de obras es rápida y limpia. Su manejo, muy sencillo.
Ver modelosLas sillas salvaescaleras curvas están diseñadas para instalarse en escaleras con giros y/o cambios de pendiente. Su total adaptación a cada tramo de escalera es posible gracias a su guía fabricada a medida. Actualmente contamos con tres modelos de sillas elevadoras curvas, todas ellas de gran calidad pero con diferentes características para adaptarse a las necesidades de nuestros clientes.
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